1 cuota de $39.999,00 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $39.999,00 |
2 cuotas de $25.097,37 | Total $50.194,75 | |
3 cuotas de $17.646,23 | Total $52.938,68 | |
6 cuotas de $10.594,40 | Total $63.566,41 | |
9 cuotas de $8.190,46 | Total $73.714,16 | |
12 cuotas de $7.116,49 | Total $85.397,87 | |
24 cuotas de $5.910,19 | Total $141.844,45 |
3 cuotas de $18.704,87 | Total $56.114,60 | |
6 cuotas de $11.706,37 | Total $70.238,24 |
3 cuotas de $19.599,51 | Total $58.798,53 | |
6 cuotas de $12.613,02 | Total $75.678,11 |
18 cuotas de $6.239,40 | Total $112.309,19 |
1 cuota de $39.999,00 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $39.999,00 |
2 cuotas de $24.503,39 | Total $49.006,77 | |
3 cuotas de $16.980,91 | Total $50.942,73 | |
6 cuotas de $9.745,09 | Total $58.470,54 | |
9 cuotas de $7.130,93 | Total $64.178,40 | |
12 cuotas de $5.763,19 | Total $69.158,27 |
- Estado: Finalizada en 8 tomos.
- Edición: Formato A5, sin sobrecubierta y ccon páginas a color.
- Idioma: Español.
- Autor/es: Mo Xiang Tong Xiu.
- Editorial Española: Norma Editorial.
¡NO TE PIERDAS EL NUEVO FENÓMENO LITERARIO!
Xie Lian, el príncipe heredero del próspero reino de Xianle, es un joven lleno de virtudes: excelso en el estudio de las artes de la cultivación, hermoso, fuerte y de convicciones puras. Son tantos sus dones que no tarda en ascender como inmortal a la corte celestial. Sin embargo, Xie Lian tiene un defecto: su tremenda mala suerte, que lo lleva a cometer tales errores que acaba siendo desterrado de los cielos, regresando al mundo terrenal. Y esta hazaña se repite no una, ¡sino tres veces! Ochocientos años después de su primer ascenso, Xie Lian se encuentra de nuevo en el reino mortal, dispuesto a obtener los méritos necesarios para ser perdonado por el resto de inmortales. Para ello, deberá llevar a cabo todo tipo de trabajos para la corte celestial, desde resolver misterios hasta enfrentarse a demonios y fantasmas. En uno de sus viajes conoce a un alegre joven, San Lang, con el que siente una inmediata conexión. Sin embargo, detrás de su sonrisa, San Lang parece esconder algo mucho más enigmático… hasta siniestro…